Durante la semana del 12 al 16 de octubre se celebró en Cochabamba, Bolivia, la XXXV Reunión de Ministros de Salud del Área Andina, con la participación de representantes de Chile, Venezuela, Ecuador, Colombia, Perú y Bolivia, el país anfitrión; en este encuentro se alcanzaron acuerdos importantes para el fortalecimiento de cinco programas médicos que abarcan los temas de prevención de la rabia humana, salud materna, regulación de los precios de los medicamentos, atención sanitaria en zonas fronterizas y cuidado médico para personas discapacitadas.
La ministra boliviana de Salud, Ariana Campero, explicó que entre estos proyectos se encuentra el diseño de un plan que permita la prevención efectiva de la transmisión de la rabia humana. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la rabia es una zoonosis (enfermedad transmitida al ser humano por los animales) causada por un virus que afecta a animales domésticos y salvajes, y se propaga a las personas a través del contacto con la saliva infectada a través de mordeduras o arañazos; se calcula que cada año mueren aproximadamente unas quince personas en América a causa de esta terrible enfermedad; no obstante, los casos contabilizados en la región disminuyeron en un 95% en los últimos treinta años.
En segundo lugar, expresó Campero, se decidió la elaboración de un nuevo plan de atención a la salud materna, bajo el enfoque de la “interculturalidad”; el objetivo, según explicó, es el de “fortalecer las políticas en términos de infraestructura, ambientes y servicios, pero principalmente el trato, la adecuación intercultural de la atención médica integral a la mujer embarazada, al parto, a la mujer puérpera, al niño pequeño y también a la mujer fértil”.
Otro de los acuerdos alcanzados fue el de desarrollar estrategias que faciliten la puesta en marcha de un plan de atención médica integral dirigido a personas con discapacidad en circunstancias de desastres, así como también el de establecer un sistema que permita regular los precios de los medicamentos en toda la región andina.
Por último, indicó la ministra, se acordó la implementación de políticas que fortalezcan las tareas de atención a la salud integral de la población ubicada en las zonas fronterizas de los países andinos, poniendo especial cuidado en el control epidemiológico, sobre todo cuando se presenten situaciones de emergencia provocadas por desastres naturales.
LQ