Muchos hospitales en todo el mundo han dado una respuesta temprana al Covid-19 gracias al equipamiento con que contaban. Sin embargo, en no pocos países la situación ha sido precaria, debido a carencias de insumos, personal calificado, suficientes camas en emergencias o urgencias, entre otras necesidades y retos
Cómo debe ser el hospital del futuro

Ante esta problemática surge la pregunta de cómo debe ser el hospital del futuro. Al respecto, se pueden mencionar algunas consideraciones recogidas en un documento recientemente publicado por la Sociedad Española de Medicina Interna y la Fundación Instituto para la Mejor Asistencia Sanitaria.

Ambos centros e instituciones abordaron las características que deben mejorar los hospitales actuales así como las que deben incorporar los del futuro tras las duras pruebas que ha planteado la pandemia del coronavirus.

Sin duda, muchos centros sanitarios tuvieron que hacer rápidas adaptaciones en sus diversas áreas para atender a los pacientes contagiados, realizar las pruebas rápidas, acoger a los asintomáticos y aplicar otros tratamientos en casos complicados e intermedios.

Aumentaron los grupos grupos multiprofesionales de atención a los pacientes

Una de las decisiones más aceleradas fue la necesaria suspensión de las consultas presenciales, o limitarlas a los casos estrictamente urgentes. Allí, la telemedicina y la asistencia en casa través de otras modalidades cobraron mayor relevancia. La telemedicina es una aliada primordial de la asistencia al paciente para consulta, diagnóstico, emisión de récipe médico, entre otros.

Otra de las adaptaciones que aplicaron los hospitales fue el método de recepción de pacientes, con el debido distanciamiento físico y el uso de mascarilla y guantes. El flujo de pacientes debió ser reducido.

Por otro lado, los métodos para desechar estos y otros materiales hospitalarios con riesgo de contaminar se han optimizado, a fin de impedir la propagación del coronavirus y de otros agentes patógenos en las distintas áreas de los hospitales.

En cuanto a las especialidades médicas, se han desdibujado los límites entre los distintos campos que conforman la plantilla tradicional, ya que los médicos han pasado a formar grupos multiprofesionales o interdisciplinarios . Esto se debe a que el nuevo coronavirus afecta diversos sistemas del organismo, y para atacar los múltiples síntomas se han debido unir médicos de las diferentes especialidades y así atacar juntos los síntomas.

El área de medicina interna es de prioridad
Más recursos deben estar a la orden de los médicos internistas

Es preciso acotar que el médico internista ha pasado a ser el protagonista ante el resto de las especialidades debido a que es el primero en recibir al paciente y establecer un diagnóstico. De allí la importancia de esta especialidad en el futuro.

Sobre el personal de asistencia, como el cuerpo de enfermería y camareros, ha sido evidente su gran apoyo ante la urgencia. Siempre han estado allí, pero ahora se ha reconocido el valor de su trabajo en las distintas áreas de los hospitales. Sin duda, han asumido nuevos desafíos, apoyados en su formación profesional y acelerando la asimilación de nuevas tecnologías aplicadas en la medicina. Uno de los cambios más significativos y que traza un puente directo hacia el sistema hospitalario del futuro ha sido la instalación de redes hospitalarias a fin de dar una respuesta rápida a los pacientes.

Los centros de salud centinelas ahora y en el futuro deben reportar a los hospitales centrales todo caso, pero estarán en capacidad de brindar la atención primaria al momento requerido. Se apoyarán, como se prevé, en un vínculo directo con los laboratorios clínicos, servicios de radiología y ambulancias para brindar la debida asistencia al paciente.

GFCh

Con información de agencias, prensa internacional y medios especializados en salud

Nuevos desafíos hospitalarios fueron impulsados por los efectos del coronavirus